El parón que vivirá la Liga Guerreras Iberdrola, por la disputa del Mundial de Dinamarca, Noruega y Suecia 2023, va a hacer que el Atticgo BM Elche deba estar sin competir hasta el próximo viernes 22 de diciembre, día en el que el equipo de Joaquín Rocamora se medirá al Costa del Sol Málaga a domicilio desde las 19:00 horas en la Ciudad Deportiva de Carranque, en la reanudación de la competición doméstica. Cuatro semanas, más la que ya se ha consumido en la que las jugadoras ilicitanas han tenido descanso, que Roger Olivas, preparador físico del CBM Elche, aprovechará para fijar las bases de una segunda vuelta con tres competiciones en el horizonte y una gran carga de partidos.
El Atticgo BM Elche abre hoy ese periodo ejercitándose desde las 19:00 horas en el pabellón Esperanza Lag, tras cuatro días de descanso que las jugadoras franjiverdes han aprovechado para desconectar tras la derrota del pasado sábado ante el Mecalia BM Atlético Guardés en A Sangriña. El viernes y el sábado será turno para trabajar también en el gimnasio, para empezar a llenar el depósito de gasolina de cara a la segunda vuelta del campeonato liguero; a la espera del regreso de Joaquín Rocamora, que está disputando con las Guerreras Junior el Clasificatorio para el Mundial 2024 de la categoría en Serbia. La plantilla franjiverde tendrá, por el momento, las ausencias de Danila So Delgado, con las Guerreras, María Carrillo y Paula Agulló, con las Guerreras Junior, Udane Bernabé, con las Guerreras Juveniles; además de Marisol Carratú y Kelly Rosa, con Argentina y Brasil.
Roger Olivas ha analizado para el gabinete de Prensa del CBM Elche cuáles serán los pasos a seguir durante el próximo mes. “El objetivo primordial es tener a toda la plantilla en óptimas condiciones” ha destacado el preparador físico franjiverde que ha explicado que “tenemos el mismo periodo de tiempo, que tuvimos durante el pasado verano, para llevar a cabo una fase de trabajo físico. Van a ser cuatro semanas completas, de las que, en la última, vamos a aprovechar para individualizar en la medida de lo posible las cargas de cada jugadora, para poder trabajar sus eslabones débiles, ver la evolución y mejoría, en los test que realizamos a principio de temporada, y que repetiremos cuatro meses después; para volver a ajustar las cargas pensando en el segundo tramo de campaña”.
Recuperación de molestias
El ilicitano ha fijado una serie de pautas que se deberán desarrollar durante las próximas cuatro semanas. “Vamos a intentar meter todas las sesiones de fuerza posibles, sin olvidarnos de trabajos específicos como las mecánicas de movimiento, sprint y el trabajo preventivo que permita reducir el índice de lesiones” y ha añadido que “tenemos que intentar que aquellas jugadoras que arrastran molestias de manera puntual, aprovechen este tiempo para recuperarse y poder trabajar sus puntos débiles. Es algo que durante la temporada es muy complicado de hacer, por estar inmersos en competición, en donde el trabajo fundamental es recuperar físicamente entre partidos, con un calendario cargado de partidos entre semana y fin de semana. Nos centramos en un trabajo más de mantenimiento, con partido jugado, recuperación y preparación del siguiente partido. Hay que aprovechar estos momentos para trabajar cosas concretas” ha finalizado.
Texto: Jerónimo Tormo / Fotografía: Vicente Irles